Mem
Mem…
Mem es la decimotercera letra del alefato, simbolizando la vida que inicia y también muerte como transformación, siendo este fluir, la fuente de la Sabiduría.
Representa al alma que, como corriente que fluye desde las “aguas primordiales del Nun”, encierra el “secreto” de su retorno; Unión de las aguas de “abajo” o “amargas” con las aguas dulces de “arriba”, sobre “la expansión”.
Mem, siendo lo “bendito” eterno e inconmensurable, como extracto del agua tras la comprensión, representa a esa "agua bendita" tras la redención. Maim, las “aguas de arriba, que tras descender”, retorna llevando lo aprendido y escudriñado “Eterno” origen, no sin antes haber labrado la tierra. “Nubes que riegan los canales”.
Este es el secreto del abismo que el Génesis, expresa, respecto de la separación de “aguas”, y se comprende por medio de la expresión de ésta letra.
Su forma “acuñada” representa un cuerpo “físico” muerto, tal cual se sepultaban en la antigüedad, brazos y cabeza hacia adelante, a manera de espiral o caracol, resumido como un feto.
Nuevo retorno.
Refleja o sobre entiende o remite a la Undécima Sefhira sin “formar”, o Daath: Conciencia.
En astrología, simbolizada por Plutón. Último andarivel de nuestro Sistema solar, quien sostiene como la correa de un vehículo, a los diferentes sistemas con la polea del motor, o centro operativo de la Galaxia.
Desde ésta Sephira o Daath, surge cada Árbol familiar e individual con su concurrencia a la luz y a las tinieblas.
El eterno devenir de las almas.
Podríamos comprenderlo como el Génesis o principio “genético”, valga la redundancia, dentro de la composición del Árbol.
En el contexto de la magia kabalística, hablaremos tras esta explicación, de consciente, subconsciente e inconsciente, y puede deducirse en base al entendimiento de Mem, el funcionamiento e inter relación de los mismos.
Como una linterna que “centraliza la Luz (Sol en astrología), la penumbra (Relaciones planetarias), Umbra, el centro de Galaxia.
El Consciente dirige o asume todo lo que es racional; y desde lo racional, o supra consciente o abstracto, a la sujeción de la mente inferior (nuevamente uno en el Uno) y su aspecto, analítico, separativo, selectivo, secuencial, conceptual y por último verbal o escrito.
Utilizado en las tareas diarias para seleccionar y decidir, sobre los aspectos de la vida diaria. Herramienta del “Libre Albedrío”.
Permite tomar decisiones, reflexionar, elegir actividades o actos; hacer comparaciones o suposiciones, razonar, analizar y por último, estructurar la síntesis personal, que se entiende en astrología, como a Zéus (Júpiter) el legislador: la propia Ley, sin dudas, relacionada a la conciencia.
Ser consciente es dirigir la “utilidad del talento personal”, que es el “proyecto del alma”, o hacia dónde debe dirigirse el canal de la Esencia como impulso, utilizando el alma como medio de “labranza” o huso de laboriosidad.
A modo de una linterna que opera la centralización de la luz, la penumbra y umbra, el Subconsciente se encuentra en la parte inferior del límite máximo de la conciencia; es una especie de piloto automático; que como en toda triada engloba todo lo que es Inconsciente, por lo tanto espontáneo, como en transe y no verbal.
Fuente de lo instinto y supervivencia, atiende a “la intuición”, desde la astrología, al planeta Urano, el “rayo de Zéus”.
El “rayo entre la lluvia” dentro de la tormenta.
Regulariza funciones biológicas, al sistema inmunitario, y de la misma manera, funciona como “alerta”.
El aspecto álmico Inconsciente guarda en memoria los conocimientos, los aprendizajes, las competencias, los recuerdos, incluso los “venidos” del Árbol genealógico.
Es ahí, donde se descubre en la misma línea genética, rasgos conocidos y desconocidos: “pertenencia”, “raíces”, incluso lejanas.
Este inconsciente es dinámico e influye constantemente en el comportamiento y experiencia; no razona, y responde las órdenes del consciente.
Siendo atemporal, registra cada idea, y así responde como una catapulta que viene desde lo lejano.
Es lo que se dijo y el proyecto de lo que se dirá, formando “cadenas” evolutivas repitentes, como el programa de una máquina u ordenador, “tesoros y virus” del “Imago”; luces y sombras.
Influyente y dinámico el Inconsciente, activa el comportamiento y la nueva experiencia; no razona, está a los órdenes del consciente.
Por ello, las “oraciones” deben conformarse en “presente”, en agradecimiento, pues todo “pedido” implica una carencia, lo que impulsa a una necesidad, éste a un deseo y el deseo a la “obsesión de querer”, manteniendo el Imago; los nueve pasos sucesivos, de un nuevo aprendizaje.
“Somnun est, imago mortis”.
El Inconsciente es la parte del iceberg sumergido, quien contiene el polo pulsión de la personalidad y del carácter, con la tendencia al placer y a la “comodidad y confort”.
También implica los procesos de mecanismos recurrentes; implica mantenerse fuera de la conciencia, por medio de los dispositivos de defensa.
Es la base de la atemporalidad del inconsciente, que no entiende “bromas”; resulta ser un “servidor eficiente”, trae lo que se desea y “pide”; todas las posibilidades desde la geometrica “Flor de la Vida”, con las soluciones a una “necesidad o problema en cuestión”, lo que lleva al humano a nueva experiencia, en todas sus facetas.
La escultura y el escultor, insertos en la experiencia. Las personalidades modificando al entorno y a sí mismo.
Ésta “generación” y “regeneración” es el círculo del “devenir” del filósofo griego Heráclito para quien, según una interpretación de Platón acerca de sus legados, " nadie se baña dos veces en las mismas aguas de un río".
El pensamiento de este filósofo está relacionado a lo arquetípico, respecto a la resolución respecto del problema sobre el devenir, que es base en toda la filosofía occidental.
El devenir es para Heráclito, la sustancia del Ser; todo acontecimiento está sujeto al tiempo y a su transformación.
Incluso, aquello que aparece como estático a la percepción sensorial, está en verdad en situación dinámica y expuesta al continuo cambio.
Esta “Iodea” (Idea) simbolizada en el "fuego", es el principio o arqué (Arquetipo) de todas las cosas, es decir, su “molde” y “modelo”.
Mateo 7:7-11
7 Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.
8 Porque cualquiera que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se abrirá.
9 ¿Qué hombre hay de vosotros, a quien si su hijo pidiere pan, le dará una piedra?
10 ¿Y si le pidiere un pez, le dará una serpiente?
11 Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos, dará buenas cosas a los que le piden?
Debido a que este elemento (Fuego) es el pa radigma de la metáfora o “parábola” por antonomasia, del movimiento perpetuo, señala la vida fugitiva, la “fugacidad” de los meteoros, siendo escala de evolución o destrucción final e ineludible, en las “aguas del Nun”, o primordiales.
El devenir es así la Ley Inmutable, el Logos, en virtud de lo cual todo cambia, a excepción de la Ley misma del movimiento, sujeta a las Leyes Universales.
La condición estática o sin evolución, es sinónimo de culminación o muerte.
En el día de la muerte, perecen también nuestros pensamientos humanos y mundanos.
Salmos 146 (Once)
Alabanza por la justicia de Dios.Aleluya.
146 Alaba, oh alma mía, a Jehová.
2 Alabaré a Jehová en mi vida; Cantaré salmos a mi Dios mientras viva.
3 No confiéis en los príncipes, Ni en hijo de hombre, porque no hay en él salvación.
4 Pues sale su aliento, y vuelve a la tierra; En ese mismo día perecen sus pensamientos.
5 Bienaventurado aquel cuyo ayudador es el Dios de Jacob, Cuya esperanza está en Jehová su Dios,
6 El cual hizo los cielos y la tierra, El mar, y todo lo que en ellos hay; Que guarda verdad para siempre,
7 Que hace justicia a los agraviados, Que da pan a los hambrientos. Jehová liberta a los cautivos;
8 Jehová abre los ojos a los ciegos; Jehová levanta a los caídos; Jehová ama a los justos.
9 Jehová guarda a los extranjeros; Al huérfano y a la viuda sostiene, Y el camino de los impíos trastorna.
10 Reinará Jehová para siempre;
Tu Dios, oh Sion, de generación en generación.
Salmo 6: 5 (Once)
5 Porque en la muerte no hay memoria de ti;
En el Seol, ¿quién te alabará?
Respecto de la ley personal dentro de la LEY:
Mateo 5:17 (Trece)
Jesús cumple la ley y los profetas
17 No penséis que he venido para abolir la ley o los profetas; no he venido para abolir, sino para cumplir.
18 Porque en verdad os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, no se perderá ni la letra más pequeña ni una tilde de la ley hasta que toda se cumpla.
19 Cualquiera, pues, que anule uno solo de estos mandamientos, aun de los más pequeños, y así lo enseñe a otros, será llamado muy pequeño en el reino de los cielos; pero cualquiera que los guarde y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los cielos.…
Volviendo a los griegos, es comprensible, entonces, que Heráclito afirme que todo fluye, y que la “imagen” (Imago) del río lo muestra; más llevando esta comprensión más lejos, su discípulo, Crátilo, objetará a su maestro, afirmando que no sólo es imposible bañarse dos veces en el mismo río, ya que en verdad ni siquiera es posible bañarse una sola vez; y ello en virtud de que el agua que moje en principio los pies, ya no será la que moje los tobillos...
Ésta concepción griega, se encuentra en las enseñanzas del maestro Jesús, muy similarmente:
Juan: 13
Jesús lava los pies de sus discípulos
1 Antes de la fiesta de la pascua, sabiendo Jesús que su hora había llegado para que pasase de este mundo al Padre, como había amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin.
2 Y cuando cenaban, como el diablo ya había puesto en el corazón de Judas Iscariote, hijo de Simón, que le entregase,
3 sabiendo Jesús que el Padre le había dado todas las cosas en las manos, y que había salido de Dios, y a Dios iba,
4 se levantó de la cena, y se quitó su manto, y tomando una toalla, se la ciñó.
5 Luego puso agua en un lebrillo, y comenzó a lavar los pies de los discípulos, y a enjugarlos con la toalla con que estaba ceñido.
6 Entonces vino a Simón Pedro; y Pedro le dijo: Señor, ¿tú me lavas los pies?
7 Respondió Jesús y le dijo: Lo que yo hago, tú no lo comprendes ahora; mas lo entenderás después.
8 Pedro le dijo: No me lavarás los pies jamás. Jesús le respondió: Si no te lavare, no tendrás parte conmigo.
9 Le dijo Simón Pedro: Señor, no sólo mis pies, sino también las manos y la cabeza.
10 Jesús le dijo: El que está lavado, no necesita sino lavarse los pies, pues está todo limpio; y vosotros limpios estáis, aunque no todos.
11 Porque sabía quién le iba a entregar; por eso dijo: No estáis limpios todos.
12 Así que, después que les hubo lavado los pies, tomó su manto, volvió a la mesa, y les dijo: ¿Sabéis lo que os he hecho?
13 Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís bien, porque lo soy.
14 Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros.
15 Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis.
16 De cierto, de cierto os digo: El siervo no es mayor que su señor, ni el enviado es mayor que el que le envió.
17 Si sabéis estas cosas, bienaventurados seréis si las hiciereis.
18 No hablo de todos vosotros; yo sé a quienes he elegido; más para que se cumpla la Escritura: El que come pan conmigo, levantó contra mí su calcañar. (Verdad o ley donde está parado)
19 Desde ahora os lo digo antes que suceda, para que cuando suceda, creáis que yo soy.
20 De cierto, de cierto os digo: El que recibe al que yo enviare, me recibe a mí; y el que me recibe a mí, recibe al que me envió.
Jesús anuncia la traición de Judas
21 Habiendo dicho Jesús esto, se conmovió en espíritu, y declaró y dijo: De cierto, de cierto os digo, que uno de vosotros me va a entregar.
22 Entonces los discípulos se miraban unos a otros, dudando de quién hablaba. (Practicidad en la fe)
23 Y uno de sus discípulos, al cual Jesús amaba, estaba recostado al lado de Jesús.
24 A éste, pues, hizo señas Simón Pedro, para que preguntase quién era aquel de quien hablaba.
25 El entonces, recostado cerca del pecho de Jesús, le dijo: Señor, ¿quién es?
26 Respondió Jesús: A quien yo diere el pan mojado, aquél es. Y mojando el pan, lo dio a Judas Iscariote hijo de Simón.
27 Y después del bocado, Satanás entró en él. Entonces Jesús le dijo: Lo que vas a hacer, hazlo más pronto.
28 Pero ninguno de los que estaban a la mesa entendió por qué le dijo esto.
29 Porque algunos pensaban, puesto que Judas tenía la bolsa, que Jesús le decía: Compra lo que necesitamos para la fiesta; o que diese algo a los pobres.
30 Cuando él, pues, hubo tomado el bocado, luego salió; y era ya de noche.
El nuevo mandamiento
31 Entonces, cuando hubo salido, dijo Jesús: Ahora es glorificado el Hijo del Hombre, y Dios es glorificado en él.
32 Si Dios es glorificado en él, Dios también le glorificará en sí mismo, y en seguida le glorificará.
33 Hijitos, aún estaré con vosotros un poco. Me buscaréis; pero como dije a los judíos, así os digo ahora a vosotros: A donde yo voy, vosotros no podéis ir.
34 Un mandamiento nuevo (Undécimo) os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros.
35 En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.
El inconsciente responde a razones de deseos no formulados, de manera inteligible, sin que se tenga conciencia de estas elecciones. Tras el cortinado o en el reflejo del Imago.
Así pues, los sentimientos que guían los comportamientos de la “personalidad y el ego, obedece a motivaciones " obscuras" del inconsciente. Fuera de la luz consciente.
El inconsciente es el “reservorio” de la libido o la energía psíquica, que como fuente “energética”, impulsa la “creatividad”, incluso en el contenido hereditario, sobre las “reformulaciones”; incita a permanecer fuera de la conciencia: “velo de Maia o confusión”, ámbito de lo instintivo, o biológico. TENDENCIA A PERMANECER EN EL SUEÑO.
Cada acontecimiento se origina en el cerebro, casi todo, pues como un árbol que tiene sus raíces adheridas a la tierra, y la cadena neuronal como Árboles cerebrales”, poseen los esquemas de pensamientos que dirigen nuestra existencia y afectan al comportamiento y así al cuerpo físico y expresión externa de “atracción”. Existen otras influencias que el cerebro recepta como receptor de radio.
Es en el inconsciente que se forjan las angustias, síntoma que una necesidad no satisfecha, pulsa determinando el “caos”, pues esta concurrencia al “placer”, no tendrá lugar en el campo existencial. Placer desplazado.
El desplazamiento conduce a la ansiedad, que es la emoción o parte integral de nuestra existencia; siendo quien estimula la creatividad y permite adaptarse a las dificultades de la existencia.
Se vuelve patológica y obsesiva cuando existe un bloqueo, una reacción de espera o una ausencia de reacción, sin adaptación a una situación “caótica” o difícil.
Este mecanismo de descenso, “bendita purificación” que permite el ascenso, no “buenamente elaborado”, puede causar crisis de angustia o transformarse en una desventaja que bloquea el desarrollo personal; siendo la “fe” en la “Creencia” o “Acreditación del ser en el Ser”, el enlace que “Une el Cielo y la tierra”. La aceptación y complacencia de la “Creatividad”.
Mateo 3:17 (Once)
Bautismo de Jesús
…16 Después de ser bautizado, Jesús salió del agua inmediatamente; y he aquí, los cielos se abrieron, y él vio al Espíritu de Dios que descendía como una paloma y venía sobre El.
17 Y he aquí, se oyó una voz de los cielos que decía: Este es mi Hijo amado en quien me he complacido.
Marcos: 1 (Uno)
Juan el Bautista prepara el camino
1 Comienzo del evangelio de Jesucristo, el Hijo de Dios.
2 Sucedió como está escrito en el profeta Isaías: «Yo estoy por enviar a mi mensajero delante de ti, el cual preparará tu camino». (Intuición)
3 «Voz de uno que grita en el desierto (Células): “Preparen el camino del Señor, háganle sendas derechas”.
4 Así se presentó Juan, bautizando en el desierto y predicando el bautismo de arrepentimiento para el perdón de pecados (Incoherencia).
5 Toda la gente de la región de Judea y de la ciudad de Jerusalén acudía a él. Cuando confesaban sus pecados, él los bautizaba en el río Jordán.
6 La ropa de Juan estaba hecha de pelo de camello. Llevaba puesto un cinturón de cuero, y comía langostas y miel silvestre.
7 Predicaba de esta manera: «Después de mí viene uno más poderoso que yo; ni siquiera merezco agacharme para desatar la correa de sus sandalias.
8 Yo los he bautizado a ustedes con agua, pero él los bautizará con el Espíritu Santo». (Lo bendito)
Bautismo y tentación de Jesús
9 En esos días llegó Jesús desde Nazaret de Galilea y fue bautizado por Juan en el Jordán.
10 En seguida, al subir del agua, Jesús vio que el cielo se abría y que el Espíritu bajaba sobre él como una paloma.
11 También se oyó una voz del cielo que decía: «Tú eres mi Hijo amado; estoy muy complacido contigo».
12 En seguida el Espíritu lo impulsó a ir al desierto, (Cuerpo físico)
13 y allí fue tentado por Satanás durante cuarenta días. Estaba entre las fieras, y los ángeles le servían.
Las aguas como manantial, o aguas de “abajo”, desde la fuente material o existencial, asciende, desde su desconocido origen subterráneo, (inconsciente, al subconsciente y desde allí, a la superación consciente), revelándose sobre la tierra como elemento y transformándola; (Renovación del cuerpo existencial o físico).
El secreto del abismo en el relato de la Creación, para revelarse sobre la tierra, también la fuente de la sabiduría expresa el poder de fluir desde su origen supra consciente.
En la terminología de la kabalá, este flujo es desde Kether ("corona") hacia Chokmáh ("sabiduría").
Esta corriente es simbolizada en Proverbios como "la corriente que fluye”, la fuente de la sabiduría".
En particular, hay trece canales de flujo, desde su origen supra consciente hasta el comienzo de la conciencia.
Estos canales corresponden a los Trece Atributos de Misericordia revelados en el Monte Sinaí, Diez mandamientos con cuatro (Trece), de Inalterable Función.
En la cabalá, el "trece mem", aparece en el "aire primordial", el "espacio exterior" en el que la letra lamed (Doce) se eleva.
Cada atributo de misericordia es de hecho una contracción de una relativamente Infinita sabiduría, ubicada a nivel de la supra conciencia; aguas que no tienen fin", para canalizar y revelar un destello de sabiduría en la "pantalla", Imago” de la conciencia.
La sabiduría consciente atrae su foco de comprensión, primariamente desde ese atributo de misericordia como "El guarda de benevolencia por miles de generaciones", Ángel Guardián.
Las iniciales de estas palabras en hebreo, forman la palabra "corriente", "la primera palabra en la frase citada anteriormente: "la corriente que fluye, la fuente de la sabiduría".
Mem que es “trece o cuatro” atbash, Mem se transforma en Yod, el punto de sabiduría o comprensión revelada, la gota de agua que emerge de la fuente de la Mem.
La Mem final cerrada o al final, el origen de la fuente de la sabiduría conectada e incluida dentro de su subterráneo origen supra consciente, corresponde al secreto de "ejad", "uno".
La Mem abierta, no en el final de la palabra, de la que surge el punto Yod del entendimiento consciente, es la primera manifestación de amor, es decir, el deseo de aferrarse a otra experiencia, con "otro", en y desde el alma.
La conexión entre las dos fuentes de la Mem, la fuente "cerrada" y la "abierta", se realiza a través del poder de los Trece Atributos Divinos de Misericordia.
Respecto de su forma, más allá de un humano muerto, estando abierta, es un cuadrado con una pequeña abertura en su esquina inferior izquierda, una corriente que fluye; auto conciencia. En su final, un cuadrado completo, una corriente subterránea; estados inconscientes del ser; el poder de reproducción. Una programación que se repite, sin evolución. Vuelta al útero.
Mem como final de “oración”, la llegada del Mashiaj.
El Agua supone “limpieza” de la imperfección o mancha. También la habilidad del agua de unir substancias, y diluirlas. Su Naturaleza descendente.
La aguas amargas de pasiones sin “fructificación”, como falsas y externas. La plenitud del agua, y su dependencia por parte de la existencia.
Imperfección; el ocultamiento de la Luz del Creador los mundos inferiores, referencia a la naturaleza.
La raíz del alma es sin imperfección.
Jesús caminando sobre las aguas “amargas”.
El amor del Creador fluyendo y avanzando, como el agua.
Relacionada al Número Cuarenta.
Cuarenta días del diluvio.
Cuarenta días de Jesús en el desierto.
Cuarenta años de errar por el desierto.
Cuarenta días de concepción hasta la "formación" inicial del feto.
Las semanas de embarazo.
Cuarenta días que Israel esperó a Moisés que descienda del Sinaí.
Los tres períodos de cuarenta años en las vidas de Moisés, Hillel, Raban Yojanan ben Zakai, y Rabi Akiva.
Cuarenta generaciones desde Moisés hasta la conclusión del Talmud.
Cuarenta codos, la altura de la entrada al santuario del templo.
Concluyendo, “el secreto de la llegada del Mashiaj”
Vitelmina Ahuir
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