OSIRION PRINCIPADO DEL KA

Árbol de la vida: Honrar las raíces



El árbol de la vida… honrar las raíces…

El árbol de la vida tiene raíces muy profundas… ligan los tres cuerpos que somos, mental, emocional y físico…

Posiblemente sea muy complejo, si lo pretendemos comprender desde la filosofía tradicional o mistérica… mejor es recurrir a un ejemplo práctico…

A medida que nuestros antepasados van haciendo ejercicio  de su misión de vida, que es para sí mismo y el resto de la sociedad, en tiempo espacio, tal como lo marcan las Sagradas Escrituras o cuanto libro por allí existe, y que son pertenencia de las diferentes creencias, se heredan tanto cuestiones no resueltas, como las resueltas… mientras van desapareciendo en el escenario físico o existencia… pero no de la vida…

Será tal vez, porque somos los mismos personajes álmicos que siguen su carrera evolutiva, sin recordar lo anterior?

En esto de pensar en vos alta, en este eterno presente, estuve recordando mis raíces, como ejemplo práctico, que no sólo son físicas, son de una línea de aprendizaje específico, que me trajo a este tiempo espacio, desde una línea inmigrante… como a muchos otros de esta nación…

Espejo de una nación mayor y celestial…

Los viejos árboles o antepasados, son el sustento del árbol de hoy, relativo al tiempo, pero devenido de un espacio mucho mayor, que no se puede ver a simple vista… pues corresponde a otros tiempos…

Heredamos sus garras respecto de vivir, sus miedos, sus frustraciones pero también el producto savia que son sus anhelos… y que radican en el cuerpo álmico…

El inmigrante tiene de por sí, un miedo enorme al destierro, a la pobreza, a la extrañeza, producto de haber sido arrancado de un lugar específico del planeta, sin poder ver que el planeta, es sólo una posición geométrica y geográfica dentro del Universo… y que podemos anclarnos en cualquier parte, de este espacio tiempo… sólo con nuestra creatividad…

De esas historias, el libro sagrado nos habla de manera permanente, cuando se refiere a las Tribus israelitas, lo que también tiene un tinte recordatorio, que la creación de las estrellas o conformaciones galácticas, sufrieron la misma experiencia en un principio… todos salidos, de la misma unidad…

En definitiva, es el miedo o remembranza de haber salido de una patria mucho mayor, que es eterna e imperecedera… lo que nos hace sufrir una especie de vacío inconmensurable y nos impulsa a la búsqueda de llenarlo… proyectándolo en sucesos o acontecimientos, que nos llevan a crecer…

Cuando comprendemos que el destierro o la inmigración no existen, puesto que la patria celestial “vive” en todo lugar o espacio tiempo, y está en todos lados, se nos fueron los años…

Volver a recordarlo en la vida siguiente, es todo un desafío de la fortaleza de cada cual, para tomar el “cetro” poder de recordar paulatinamente, nuestro desarrollo total de múltiples vidas…

La anamnesis u olvido, es solo un velo diminuto, que nos empaña la visión, de saber que todos estamos unidos en un punto creacional, que es eterno e imperecedero…  y que como destello de luz, fue en un solo tiempo espacio… y que los científicos apoyan como teoría del big bang…

Todo el resto, es una ilusión constante de estar separados, ya que todos estamos unidos por en y dentro de esta gran raíz, que se nutre de los principios de los tiempos…

Si tan sólo el hombre como raza, lograra mirar, que es una unión en lo profundo y especial de la noche de los Universos y multi versos, la vida en el planeta que habitamos, sería menos angustiante y menos difícil…

Podemos mirarlo desde lo generacional, como de lo celestial…

Comprendido desde las ciencias que abordo, la kabalah, entenderíamos que el lugar de origen es denominada la corona, o gobierno celeste, que desmiembra sus brazos como un árbol invertido, cuyas raíces, están en el cielo… o punto referente a lo inteligible o inteligente… pureza absoluta…

Es el mundo de lo mental, de la identidad esencial, y también del pensamiento supremo…

Pensamiento supremo, que permite los pensamientos formas o formas de pensamientos…

1.       Formas de pensamientos en la diversidad o multiplicidad;

2.       pensamiento forma, como molde creacional matemático y físico… que se expresa en el marco de concreción o tangible, con posibilidad de ser medido y numerado…

Que como rayo de luz único, en una multitudinaria luz se abre, dando creación a la primera mansión que es la inteligencia…

La inteligencia produce el sonido de las palabras y el lenguaje para traducirla al plano álmico, que es la herramienta emocional, en un triángulo descendente o establecido de idéntica manera, en los mundos sutiles… de allí, Entendimiento, Inteligencia y Logos o logística de lenguaje, son la primera triada o Trinidad… (Triángulo)

“En un Principio era el Verbo y el verbo era con Dios”…

Hemos escuchado millones de transmisiones verbales, que luego, dentro de lo que hoy somos como humanos, son millares de aciertos y desaciertos como frutos, cuyo acertijo en el mundo de las formas, debemos develar y buscar, para integrar nuestra identidad…

Identidad  que no es respectiva sólo a la herencia terrena, hijo de… que está ciertamente apoyado miles de veces en las escrituras, como ORIGEN y RECONOCIMIENTO  a los predecesores, sino que se remonta al principio de los tiempos como entidades divinas o seres participantes de una gran corona o inicio, desde donde dividimos o emigramos… que podría llamarse con cualquier nombre, pero en kabalah y RECONOCIENDO  el origen:

 YOD: ORIGEN

HEI: DUALIDAD

VAV: DESCICION O ELECCION

HEI: CREACIÓN INDIVIDUAL

YOD HEI VAV HEI o sencillamente: Dios…

Al parir la corona  o Entendimiento, para formar la inteligencia y este a la vez, se multiplica a sí misma para ser comprendida en lenguaje y razón, la Corona Universal creó el día y la noche… la dualidad y como dualidad, la expresión más alta en este planeta las luminarias, sol y luna... que es idénticamente en  el sentido de hombre y mujer,

En lo tocante a mi vida personal, insisto, pensando en voz alta, para recordar mi herencia, sus miedos pero también sus anhelos, me siento en la silla de espectador de la memoria, para rendir homenaje a uno de los grandes de mi vida… mi abuelo paterno… y en él, al resto de mis antiguas raíces terrenas…

Mirar sus errores y aciertos, es un ejercicio contemplativo de resultados en el hoy…

Posiblemente, honrarlo, porque a él  le debo una visión básica, de la cual arranqué…

Y en la que sustento mi identidad o identificación terrena, parte de la celeste…

Honrar nuestras raíces, nos ancla en el plano tridimensional, con respeto y alegría de ser humano y Ser en ejercicio de las funciones terrenas de aprendizaje…

Entonces vuelvo al pasado, a escucharlo con atención y dedicación absoluta en el eterno presente…

El abuelo Francisco, Quito (De Francisquito) para sus nietos, era un espigado valenciano, cuya filosofía de vida, “anclaba” solamente en el pensar, que no había más dios que el sol, ni más diosa que la luna… para mis ojos, UN GIGANTE…

Abuelito no sabía leer ni escribir, pero era un catálogo de mil cosas… como una biblioteca viviente de conceptos, de visiones, de recuerdos, de imágenes, paisajes y coplas de su lugar de origen…

Cuando me siento en inferioridad de condiciones frente al mundo, recurro a ampararme en esa raíz, tan profunda, venida de otro lugar del planeta… y que sube a las raíces en el cielo…

Trepo rápido, tal vez, porque en sus orígenes el hombre, era arbóreo…

Tenía el don, aunque no supiera leer ni escribir,  de hacer vibrar mi alma con sus palabras y mi corazón con sus historias… sencillamente, me hacía soñar… imaginar… fuente de toda creación…

Los sueños, producto de la primera inteligencia o de la corona, son la raíz del árbol invertido que somos, devenidos de las estrellas…

Por ello es, que piense, sin lugar a dudas, dentro de mi verdad que no es absoluta, que todos, lentamente, vamos escalando por ese árbol esa raíz, a la corona, desde donde partimos en algún espacio tiempo, y que no se mide en las distancias habituales o magnitudes acostumbradas por la humanidad…

El ejercicio corpóreo es descendente, el álmico y esencial, es ascendente…

Desde esta corona, vamos eligiendo “modelos”, al bajar, tal si comiésemos frutos en el camino y que adquirimos desde temprana edad, para realizar nuestra tarea o función humana… …comparados con semillas idénticamente…

Desde ese modelo inteligente, que repetimos desde imágenes y lenguaje, nuestra vida, da sus frutos y nuevas semillas… a su vez…

Nuestros descendientes, como frutos de un árbol temprano, heredan las cuestiones que en tiempo espacio de origen, están resueltas y las que no pudimos resolver y así nos muestran el resultado…

Todos sembramos en los que vienen, pues los árboles enredan sus ramas formando una sociedad, o selva, en que se heredan multiplicidad de dichos, de conceptos, nunca errados, puesto que cada cual dará su resultado, siendo artífices de un destino común… alimentándonos de frutos duales… que en este tridimensional punto de dimensión, tienen su razón de ser…

Por ello, podríamos definir a la tierra, como planeta escuela…

Es posible que los alumnos de mi escuela o lugar formativo en estas ciencias, me hayan escuchado decir una y mil veces, no siembren árboles de cuyo fruto no querrán comer luego… máxime, si sabemos que darán multiplicidad de los mismos frutos…

“La tierra te he dado por heredad: multiplicaos y henchid la tierra de hijos”

La única savia que destila el árbol es energía pura y absoluta… es la decisión de cómo queremos utilizarla, lo que produce un árbol cuyo fruto sea exquisito al paladar y luego al alma… “la siembra…”

Esta bendita savia o energía, tanto da frutos dignos como amargos… y los árboles de frutos amargos, de igual tamaño que los dignos, pues devienen de un mismo origen, son más costosos desterrar que los buenos… y para arrancarlos, debemos actuar como mineros… ir a las profundidades donde se arraigaron con toda su fuerza… esto es, en el campo terreno…

El secreto radica, en que el fruto amargo, nos quita las fuerzas y va menguando el interés en construir…minan de a poco, LA Voluntad…

Voluntad: savia pura y energética que procede desde las raíces celestes a la terrestre, pasando por el álmico o cuerpo sutil de emociones y sentimientos…

Cuando se han sembrado demasiados frutos amargos, se nos va la vida, tratando de limpiar el bello jardín o recuperar el Edén perdido…

Volviendo al abuelo… modelo álmico de quien suscribe, y que se proyecta en el hoy respecto de tiempo espacio tridimensional, y que se proyectará en mi línea o estirpe terrena, correlativa a cientos de estirpes terrenas, devenidas de un mismo caudal: gracias hoy te doy, porque sin dominar un teclado, sin dominar la escritura, en mí forjaste lo mejor para mi alma, un resguardo absoluto para mi niña interior…

Vitelmina Ahuir

 

 


Osirión Principado del Ka

Crea tu insignia
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis