LETRAS HEBREAS: SIGNIFICADOS
Aleph
La primera o última letra, como se quiera mirar, dependiendo de descenso o ascenso de espiral evolutiva, es Aleph…
Relacionada con el fuego y el aire, está ligada intrínsecamente al pensamiento y a las formas de pensar… o pensamiento forma…
Referencia de la impronta o sello que se infundirá en la placa madre, como una primigenia imagen, la que luego será madre de formación en lo físico, y de esa forma o manera de pensar… surgiendo lo que luego llamaremos, manifestación física…
Podríamos compararlo al microprosopo (hombre) ante y en relación “mágica” al macroprosopo (Dios), donde en cuyo puente estriba la magia de relación entre las partes, y cuya expresión creativa de cada autor, respecto de la propia vida, son manifiestos frutos de los cuales se alimenta en cada uno de los tres planos…
Mágico, puesto que magna es la tarea de voluntad, coherencia y concordancia de cada actor y autor de los propios días, en el plano de la existencia, que daríamos bien en llamar Obra Propia o Individual e indivisa… aunque flexible y cambiante respecto al grado evolutivo de conciencia, que se transforma y transmuta, con relación al medio, y que se expresa en todos los planos…
En el mundo de las ideas, la flexibilidad del elemento aire, o la reflexión, es un requisito indispensable, más un exquisito aditamento en la profunda alquimia de la renovación del producto terreno, desde el cambio de forma pensamiento, el que incide en el ánimo o alma, llegando a existir en el espacio tiempo… y viceversa…
Por lo tanto, tendríamos que apreciarlo, desde una circulación descendente y ascendente… la segunda incluyendo a la primera y viceversa, en un espacio que no tiene permanencia ni pertenencia con relación al tiempo…
Así, siendo en el mundo de Iodea o de las ideas, principios pasibles o posibles de ser procesados por la razón, con asistencia de la lógica, se entiende al génesis o principio viviente del Ser; magnífico principio viviente, que se expresa o deja comprender a través de la palabra…y que cambia de significado o significación a raíz de los procesos propios o inherentes de la acción o función de pensar… luego, coherente con el actuar, lo que lo salva de la partición en múltiples reflejos, en que tormentosamente puede dividirse, como nubes existentes en los cargados cielos; siendo el rayo primigenio de alumbramiento a la razón y asistencia de su propia lógica…
Relacionada con el principio activo de toda cosa, es símbolo de creación en el “cielo” en correlativa correspondencia a la omnipotencia e inefabilidad de la palabra expresada en el plano del tiempo espacio, que implica al Uno (como emanación creadora), al dos, como principio femenino receptivo (imagen) y al tres como hijo o manifestación verbal del pensamiento o idea, convertido en el fruto entre ambos principios relacionados…
Por lo tanto, podríamos decir, que el conocimiento del Uno con implicancia del terno o triada, conduce a la fe, que no es otra cosa que la confianza razonable en la unidad de razón y lógica, que se expresa en la universalidad intangible de la palabra, devenida del principio viviente, que asimilado a través de la pineal, conecta al Ángel o Guía Superior, con el actor que somos en tiempo espacio o existente, siendo en el mundo de la esencia, una chispa Divina o angelical si se quiere pensar como tal; pero entidad, que expresándose como viviente en los estratos superiores, dirige mágicamente una caja corpórea, que tal carro, “manifiesto” en acción coherente, respecto de la emanación que percibe, y desde el mundo creación o primario, termina siendo resultado de la máxima expresión de la Unidad o el Todo, en su alícuota parte indivisa…
Vitelmina Ahuir
