OSIRION PRINCIPADO DEL KA

Comienzo de lectura

Lectura de hemisferios

Cuando nos hemos referido a la carta natal o rádix, no debemos olvidar de la disposición circular (Plano) donde estamos insertando el complejo accionar planetario, e insisto, recordando también de la profundidad en que actúan los “personajes” o planetas… lo que la estructuran de manera esférica o en concepto de volumen… (Espacio)

En profundidad, Saturno estará más alejado a mercurio, pero Urano, Neptuno y Plutón, aún lo están más…

Vale decir que la esfera, es infinita, al igual que sus posibilidades de conectarse con el imperio multidimensional de las otras galaxias…

Así, el lector no consensue con este esquema y lea por curiosidad, iremos integrando para todos, la visión sicológica astrológica, que compendia o constituye una paridad con la sicología conocida, accionando un léxico, que conforma a las ciencias astrológicas, pero identifica a los órdenes mentales que se abordan en la segunda, idénticamente…

Si nos referimos a la “crucifixión”, la humanidad en tiempo espacio, lo está por medio de tres cruces… en relación a los elementos y los diferentes modos de actuar de ellos…

Pero valga por el momento decir, que la primera cruz, está relacionada con el comienzo de la experiencia, estatuyendo lo que se conoce como ascendente (Amanecer de una constelación), descendente (Poniente de una constelación), medio cielo (Zenit de una constelación) Imun Coelli ( Nadir de una constelación).

El ascendente es la constelación que en el “fecha, lugar de nacimiento y hora), asciende en el horizonte como indicativo del motivo “incursión” en este espacio tiempo, siendo el descendente, el ultimo destello o constelación del poniente, símbolo de un aprendizaje que ya expira…

Como los movimientos son dextrógiro y levógiro, en el primer caso, un final para internalizar; levógiro, un final del cual se debe desapegar…

Zenit: el más alto lugar en que el individuo puede descollar: dextrógiro enseñanza de lo aprehendido; levógiro: reunión con pares complementarios…

Imun Coelli o Nadir: dextrógiro, sentir el concepto o integrar el concepto acorde al sentimiento y emoción; levógiro: SER el concepto más lo sentido…

Cabe recordarles en este punto, que las constelaciones conocidas como doce signos, se encuentran en la parte más ancha de la tierra, y son las respectivos doce signos conocidos como zodíaco, sin independencia de la influencia del resto de constelaciones en ubicación diferente, con las que se entraman como red en totalidad…

 

Comenzaremos por el estudio de los signos por separado:

Un signo es una porción de la esfera, relacionado con las estrellas, que al parecer están fijas, pues la distancia enorme a la que se encuentran, implican un movimiento tan lento que son pasibles de registrarse en eones…

Visto desde la tierra, el sol dentro de la esfera, tal el puntero de los minutos dentro del reloj común, cubre un recorrido de un “minuto” por día…

De esa manera, en treinta días, (visto desde la tierra), el sol cambia de signo o fracción estelar de fondo…

Pasa así, en trescientos sesenta y tantos días, por todos los signos conocidos, que son doce…

Respecto de los elementos, tres signos de fuego, tres de tierras, tres de aire y tres de agua…

Para comprender mínimamente la estructura, comenzaremos por los diferentes grados de la interpretación plana o circular…

A cada signo, le otorgaremos un dueño de casa o regente, en honor a las cualidades de los elementos que lo conforman y asisten en rigurosa similitud de la descripción conceptual, con identidad al dueño, o planeta…

Valga el refrán: “no hay prenda que no se parezca al dueño”…

En esta cuestión de “dominio”, los planetas disputan sus potestades en esta orquesta sin final, siendo de esta manera: regente (dueño del lugar), detrimento (Está en el dominio del frente o enfrentado a lo que debía ser como dómino); Exaltado: Invitado de honor en un signo, como embajador representante de su país o dominio; Caída: huye del cautiverio, en un dominio hostil, en que puede estar esclavizado…

Hasta lo que hemos enunciado desde el comienzo de este desarrollo, en una carta se debe tener en cuenta: elementos; planetas; signos; profundidad y cuadrilátero; dignidad planetaria (regencia, detrimento, exaltación y caída); dignidad planetaria por casa (Dominio no sólo de signo, sino también de casa…); además de la distancia angular de los “actores o planetas” entre ellos, con el comienzo de un “signo” o cúspide de signo; la relación con la cúspide y despliegue de casa; lo que indica para el campo conceptual, elaborar dentro del razonamiento, un holografía particularmente esférica, dentro del primigenio campo de ajedrez que propusimos en un inicio…

Incluso, en el devenir del desarrollo, agregaremos decanatos o porciones de signos, que distan de la cúspide del signo, de la siguiente forma: entre 0 grado a diez grados (Primer decanato); diez grados a veinte grados (Segundo decanato); veinte grados a treinta grados (Tercer decanato)…

Cabe a esta altura indicar, que existen dignidades accidentales relacionadas a las casas, aun cuando su dignidad esté en diferente estado respecto del signo…

Para simplificar en un ejemplo: “cuando se utiliza un dominio que no es propio, con el ánimo de dueño”, algo parecido en las disposiciones legales a la tenencia…

La tenencia puede ser socialmente de característica lícita o ilícita, dependiendo del dómino o dueño y del lugar donde se encuentre…

Similar al juego de “Monopolio”, para amplificar el concepto…

Signo de Aries:

Para el campo tanto esférico como circular, es el comienzo del zodíaco…

Su posición se encuentra entre 0 º grado y treinta, donde entrega su “mando o dominio al próximo, que es Tauro, viniendo de su antecesor, Piscis…

No intenten interpretar un signo escindido de otro u otros, puesto que es una totalidad…

Si algo comienza, viene de un proceso anterior…

No hay gallina sin huevo, ni huevo sin gallina, es elemental, de allí el acertijo tan conocido de los sofistas…

Algo comienza para manifestarse y ese manifiesto, retorna luego de la disolución o muerte, tal el fénix resurge de las cenizas…

Es la compleja lectura de la astrología, donde los planetas de casa doce, relacionada con piscis, duodécimo signo o final, nos relatan el advenimiento en dextrógiro, ¿Cómo sigue después del amanecer, esta esencia sostenida por el alma, y forrada de un cuerpo físico?  más, la relación con la casa dos o Tauro, lo levógiro: ¿ Cómo explayará sus valores conferidos, expresará sus talentos y los añadirá a toda chispa iniciática de la raza humana?

A esta acción y reacción del medio, donde un alma se alojó para realizar la experiencia, no es en función del individuo, sino de la totalidad…

La totalidad se “individualiza” para buscar una nueva premisa “única” en beneficio del Todo…

“Este es mi Hijo amado y en Él me complazco”: Biblia…

Aries: símbolo del Cordero…

Este hijo del Todo, debe buscar la repuesta a todos los interrogantes de su encarnación, dentro de sí mismo, y no encontrará “paz”, hasta no saber las respuestas, por lo menos en parte…

El tierno cordero del sacrificio de Isaac, se convierte en el carnero que a su paso por la existencia, deja la impronta de su recorrido, tal la ráfaga de fuego marca un trazo de su camino hasta recorrer las doce etapas de su desarrollo…

Carnero: posee “limitado” poder de liderazgo, por lo tanto detenta potestad de mando acorde a la premisa de su función…

Fuego:

Perteneciente al elemento fuego, siendo la chispa inicio de la encarnación o existencia, su calor es puro entusiasmo, fervor; si su designio opera en el imperio de la majestuosidad de su origen, encontrará su brillo mayor en el Ser o Esencia, y se retroalimentará hasta el final…

Cardinal:

Siendo comienzo de una etapa importante de la encarnación, trae en sí mismo la acción…

Polaridad a integrar con el par o reflejar al par opuesto complementario:

Positivismo, extroversión, activismo, masculinidad, empuje, dinamismo…

Relacionado a todo “Inicio” de creación, enlazado al “UNO” y su despliegue cardinal en “cuatro” puntos o cruces…

(Uno = 1­ más dos, más tres, más cuatro = 10 (Diez= 1 más cero, es UNO)…

Todo inicio tiene su proyección, despliegue y aprendizaje: es el acertijo resuelto, que conlleva el aprendizaje; más todo aprendizaje es un eslabón o peldaño en la espiral evolutiva; este eslabón implica un final, más todo final en sí mismo implica un inicio…

…si lo vemos desde un ejemplo práctico:

Si en un plato con agua en descanso, apoyamos un dedo, éste movimiento como reacción, genera ondas dentro de la quietud del agua; el dedo sigue siendo (inicio), el agua sigue siendo (Medio), más las ondas en algún momento se detienen, al borde del recipiente (Movimiento), (Cuerpo físico o medio físico)…

Constantemente introducirnos el dedo en el agua… producimos diferentes inicios en el medio ambiente… introducción a una nueva experiencia… desde el eslabón anterior como pista de despegue…

Experiencias que siempre tenderán a llevarnos al origen… de ahí, alfa y omega… una y otra vez, hasta que, habiendo pasado por cada espacio como el “minutero” explicado, se cambia de “dimensión” en cualquiera de los cuerpos, hasta completar el ciclo en veintidós etapas o multidimensiones…

El introducirse en una nueva experiencia, surge de un estado de “necesidad” de sumergirse en la misma… y esa necesidad se genera a partir de un impulso (Aries) que el externo “tienta, produce un llamado o  seduce al impulso, más lo recepta”; un medio, llamado “deseo”, (Tauro, deseo por excelencia), el que llevará a la concreción en acto, teniendo la virtud inicial o comienzo de la experiencia… denominado el por qué, para qué, el cómo y el cuándo…

Génesis:

2:7 Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.

2:8 Y Jehová Dios plantó un huerto en Edén, al oriente; y puso allí al hombre que había formado.

2:9 Y Jehová Dios hizo nacer de la tierra todo árbol delicioso a la vista, y bueno para comer; también el árbol de vida en medio del huerto, y el árbol de la ciencia del bien y del mal.

2:10 Y salía de Edén un río para regar el huerto, y de allí se repartía en cuatro brazos.

2:11 El nombre del uno era Pisón; éste es el que rodea toda la tierra de Havila, donde hay oro;

2:12 y el oro de aquella tierra es bueno; hay allí también bedelio y ónice.

2:13 El nombre del segundo río es Gihón; éste es el que rodea toda la tierra de Cus.

2:14 Y el nombre del tercer río es Hidekel; éste es el que va al oriente de Asiria. Y el cuarto río es el Eufrates.

2:15 Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase.

Regente:

El planeta Marte es el domus o dómino del signo de Aries…

Siendo su consorte la refinada y deseosa Venus, la misma se encontrará en detrimento o fuera de su casa, en Aries… Opuesto complementario…

“El deseo vehemente será por tu esposo y él te sojuzgará” Biblia…

Todo impulso debe llevar “Conciencia de Ser”, de lo contrario, será un impulso fallido…

Se tiene que tener claridad en el motivo o deseo que impulsa a introducirse en la experiencia, o el concepto de “identidad primigenia”, de lo contrario, la experiencia será una flor, cuya esencia y perfume se diseminará en el medio, para ser transitada por otros… repetición de historias…

De allí surge la exaltación del Sol en Aries…

La conciencia o sol, se impulsa a la conquista de la experiencia, a sabiendas de su expansión…

En este desempeño audaz hacia lo nuevo, los miedos, los resentimientos, el encadenarse a los antiguos límites, darán una experiencia con resultado doloroso… hasta volver al ámbito de Piscis o su disolución…

Saturno en Aries y su caída…

Toda restricción de la tierra o estructura relacionada con Saturno (tiempo espacio) en los signos de fuego, resulta en incomodidad y limitación…

“Del polvo procedes y al polvo retornarás”… Biblia…

Todo comienzo en espacio tiempo, tiene su “duración”; más todo lo proveniente del fuego o esencia, nunca fenecerá… simplemente “Es”…

Todo (Uno) es renuevo y comienzo… y encierra en sí mismo, una nueva etapa…

La maestría del YO SOY…

Registro de un nuevo sembrado:

Salmos 65:11 en sus tres etapas principales…

11 Tú coronas el año con tus bienes,

Y tus nubes destilan grosura.

12 Destilan sobre los pastizales del desierto,

Y los collados se ciñen de alegría.

13 Se visten de manadas los llanos,

Y los valles se cubren de grano;

Dan voces de júbilo, y aun cantan.

Como todo inicio e impulso, Aries se relaciona con la cabeza; el cuerpo mental…

Al nacimiento propiamente dicho…

En todo nacimiento humano, está presente la sangre de la madre en el parto, vale decir, el ejercicio de la emoción; el ejercicio y costo corpóreo de “parir”…

Génesis 3:16 A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos;

Génesis 3:19 Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.

Por lo tanto, el color con que se designa a Aries, es el rojo… símbolo de Adán el rojo o Adán Cadmón…

Su actitud a resolver, será fundir el ímpetu a la constancia del aprendizaje; y como tal, forjará en la fragua de su mente, la fortaleza del Hierro… y como tal “machacará con su mazo, sobre lo caliente…

Génesis 3:24 Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.

Siendo el primer signo del zodíaco, abraca desde 0 º a los 30 º de la rueda circular o esfera…

En relación a los signos de fuego, compendia el trabajo de los tres signos del mismo elemento:

1.      Aries (Inicio de la identidad que nace a la experiencia como certificación externa de esa identidad, el nombre, sin nombre no hay existencia o reconocimiento de existencia, no hay conductor sin licencia de conducir). Génesis 2:19 Dios formó, pues, de la tierra toda bestia del campo, y toda ave de los cielos, y las trajo a Adán para que viese cómo las había de llamar; y todo lo que Adán llamó a los animales vivientes, ese es su nombre. Lucas 1:26-38 Anuncio del nacimiento de Jesús 26 A los seis meses, Dios envió al ángel Gabriel a Nazaret, pueblo de Galilea, 27 a visitar a una joven virgen comprometida para casarse con un hombre que se llamaba José, descendiente de David. La virgen se llamaba María. 28 El ángel se acercó a ella y le dijo:—¡Te saludo, tú que has recibido el favor de Dios! El Señor está contigo. 29 Ante estas palabras, María se perturbó, y se preguntaba qué podría significar este saludo.30 —No tengas miedo, María; Dios te ha concedido su favor —le dijo el ángel—. 31 Quedarás encinta y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. 32 Él será un gran hombre, y lo llamarán Hijo del Altísimo. Dios el Señor le dará el trono de su padre David, 33 y reinará sobre el pueblo de Jacob para siempre. Su reinado no tendrá fin.

2.      Leo ( Ser la experiencia) y

3.      Sagitario (las brasas de la hoguera, reposando en sus cenizas, la simiente de la maestría)… inicio, identificación y aprendizaje y/o enseñanza…

Respecto de la tri partición en decanatos:

1.      0 º a 10 º, sub regente Marte (Aries) Gran iniciador…

2.      10 º a 20 º, sub regente Sol (Leo) Inicio optimista y centrado en la esencia…

3.      20 º a 30 º, sub regente Júpiter (Sagitario) inicio de la maestría; inquieto inicio del retorno al hogar, por medio de la fe…

Características del signo de Aries:

Rasgos positivos:

Representa la energía, el impulso, la impronta, la acción, la pasión, la iniciativa, el valor, la decisión, el ímpetu, la valentía, la audacia, el coraje, la fortaleza del espíritu competitivo, pasión, la frontalidad, el liderazgo, la aventura, la ira sin rencor, el alerta, la dirección  a tomar, la espontaneidad, el entusiasmo, las ideas brillantes, el desafío, la conquista, independencia que no es igual a libertad…

Relacionado con los movimientos voluntarios, la intrepidez, el enfrentamiento de los obstáculos…

Rasgos negativos o en sombra:

Negación a la reflexión, la actuación sin consideración de los demás, impaciencia, intolerancia, rudeza, brusquedad, imprudencia, dominación, vehemencia, falto de diplomacia, falta de tacto, desorden, agresividad, dominación, avasallamiento, la venganza en el rencor…

Expresiones externas:

Relación con los metales, específicamente los cortantes; las lanzas, puñales, tijeras, bisturíes…

Con los deportes, incluso los de gran riesgos… Deportes individuales que contengan riesgos y competencia a ultranza…

La conquista en cualquier área; el aspecto masculino…

La excitación, el nerviosismo, el aspecto combativo, el arrebato, el sorteo de obstáculos… la lucha, la batalla  despiadada, “hacer o morir” o “hacer hasta morir”…

Relacionado con los apurones, el exceso de franqueza, las heridas, los riesgos, el lema “hacia adelante”, el peligro… y en algún modo, el egoísmo…

Aries no tolera la debilidad…

En las relaciones amorosas, es el aspecto impulsivo, lo ardiente, por lo tanto son celosos y apegados…

Relacionado al niño que recién llega a la existencia, sus berrinches, sus exigencias, como también a su inocencia, su ingenuidad, su inocencia, su entusiasmo, y también su alegría…

Son los que cargan una mochila o portafolios (cuerpo físico) y se lanzan a la aventura de vivir…

No escatiman energía, pero su fuerza no alcanza para solidificar, por lo tanto necesitan empeño para no aburrirse…

Existe en el concepto de ser único, por lo tanto es demandante en el área en que se instala, hiperactivo, compartirá en tanto y en cuanto sea el líder…

Si se contraría produce fiebre, accidentes, ira contenida…

Irradia calor, frenesí y entusiasmo…

En la carta natal y sus derivados:

Donde Aries se encuentre, será el lugar donde el individuo tenga puesto su “ego” o yo; donde deposita su fuerza, su energía, su pasión…

Ejemplo:

Un Aries en casa seis o de virgo, su fuerza radicará en el trabajo… pues Aries aporta la energía tosca, sin pulir; su nacimiento y renacimiento…

Deber Ser:

Aries debe aprehender que existen otras formas de pensar, sentir y hacer…

Que cada individuo es un Universo en sí mismo, independiente en sí mismo, pero un engranaje dentro del concierto de Universos, que no está sólo, es parte de un Todo…

Gemas:

Rubí, granate, malaquita, entre otros…

Continúa

Vitelmina Ahuir


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