La Máscara (17)
La máscara…
A veces cuando quiero
esconderme en el silencio
mientras el cerebro diciendo
más que concordar exalta,
dibujando va la traza
la imagen de aquel payaso…
Que desdibujando espacios
disfraza sus sentimientos…
Retiene graves sestercios
que mi corazón le dicta
bajo promesas benditas,
que ataron en aquel tiempo
las rimas de su destino…
Y es juramento vertido
desde concordia en espacios
que cercenando el ocaso
de mi deseo recóndito
tal parece va buscando
esconder sus nobles trinos…
Entonces tan sólo atino
a colocarme la máscara…
Lugar donde sierpe estafa
la razón y mi pensar
sin poderse sincerar
con lo recóndito en el pecho
ahogando los arpegios
de gritar la sin razón…
Es blasfemia en mi interior
desnudando cada estilo
y en una mueca al decirlo
con sentidos sin sentidos,
que la vida sólo es sino…
El destino es quien deshoja
las tiernas y cálidas fojas,
acortando noble tiempo…
Oh calma superficial!
Qué traza todo acomodo
mientras en mitad del lodo
el corazón siempre altivo
desmembrado en cristalinos
granos de arena desierta
buscando el abrir sus puertas
tras la imagen de ficción:
Gritar aquel sinsabor
de promesa que tal pesa,
como corrientes estrechas
conteniendo gran embalse…
Es estancado desgaste
de sufrimiento cautivo,
vaga el designio furtivo
de ofrecer el desvarío
de un amor que sensitivo
en la esperanza del tiempo,
esconde el tibio tormento
perpetuado en la distancia…
Y mientras tanto declama
con sólo un diario decir
que te amo y así vivir
escondida entre las letras…
¿Es la máscara tristeza
de fundirte en un abrazo?
y enredarte aquí en los lazos
de eternidad del recuerdo,
cubriendo profundo anhelo
de cada tierna caricia
que evoca mi sentimiento...
Y en los tiernos aposentos
donde frugal mi alma vive
y también así desvive,
diciendo cuanto te espera…
Vitelmina Ahuir