Glaciación
Glaciación…
La vida es la más alta expresión del amor universal…
Desde la dualidad: luz y sombra, los universos se han estructurado, conformado, ordenado y simplificado como sistemas... todos armónicamente dependientes en concordia y equilibrio…
Necio y ególatra sería el pensar, que somos el único planeta habitado y con vida…
Posiblemente, no tal y cual la conocemos, en la que intervienen los cuatro elementos, asociados a las diferentes direcciones… lo que nos presenta la comprensión de tercera dimensión…
En el caso del reacomodamiento posterior al choque de Marduck (Júpiter) con Tiamat (Tierra), nombres dados por los antiguos escritos Sumerios, Caldeos y Persas… la tierra tomó su posición de eje inclinado, acorde al punto referencial del sol, y así comenzó su período de desglaciación…
La primera porción de derretimiento de hielos, fue desde los 30º de latitud Norte, a 30 º de latitud sur, a partir del punto esquema y referencial del ecuador…
Vale decir, una porción de 60º, en cuya franja se desarrollaron las antiguas y primigenias civilizaciones de las cuales tenemos noticia…
Difícil sería comprobar, si nuestra genética corresponde a alguna civilización estelar, salvo por los indicativos de los manuscritos más antiguos, su constante hablar de dioses y la “unión” de los dioses con las criaturas de la tierra… (¿Homínidos?)
Zachary Sitchin en su libro: Una escalera al cielo, propone la descendencia, desde un planeta que tiene una órbita de 3.600 años, idénticamente a nuestro tiempo sincrónico, y cuya órbita, tal cual una cadena perpendicular, pasaría cercana a Júpiter, en ese espacio tiempo referido…
Teoría que sustenta algunos acontecimientos por demás importantes, como es el diluvio universal, motivado por la inversión polar y el consabido desastre de derretimientos de hielos, que avanzaron sobre la tierra árida y seca, convirtiendo desiertos en parcelas floridas, y antiguos cauces de mares y océanos, se trocaron en los actuales desiertos…
Pero partiendo desde lo cierto y real, las sapiencias más antiguas, hoy conocida como “tradición” (Traditere, latín o transmisión) radicadas en el planeta, existieron en ese espacio terreno… de 60º…
De igual modo, un razonamiento lógico, nos muestra que todo el orden estelar y planetario, además de poseer sincronía, procede sistémicamente como órganos similares a un cuerpo humano…
El traslado de fluidos en nuestro cuerpo es acuático, en el Universo, aire… para los antiguos: fluido astral…
Todos y cada uno de los cuerpos, tal y como los conocemos, se mueven en el fluido astral…
Volviendo a la comparación del movimiento de elementos en los fluidos… idénticamente las mitocondrias, llevan su enérgica provisión de alimento a los diferentes tejidos y órganos humanos, los fluidos astrales influyen totalmente en el crecimiento personal de los seres humanos…
Sólo observando, veremos a sistemas, dentro de sistemas en ordenada consonancia, rodando interminablemente en el concierto universal…
Aceptando esa primera visión general… entendemos que astros y estrellas, son generadoras de fuerzas, que influyen en el estado, crecimiento y comprensión de lo sistémico, y de la raza humana…
A partir de este principio fundamental, y mirando sabiamente el transcurso de nuestros días y vidas, hay dos presencias que nunca faltaron en su idéntico sistémico tiempo, y en las mismas características y hablamos de las principales luminarias: sol y luna…
A saber:
· Polaris
· Eta Draconis
· Eta Hércules
· Vega
· Deneb
· Alfirk
Los antiguos llamaron a esta relación, la precesión de los equinoccios…
Este movimiento generador de un tiempo mucho mayor y casi incomprensible para la mirada humana, fue tallado en el arte de todas las culturas que precedieron a la actual… incluso, luego delo que pudo haber sido el “diluvio universal”, las culturas totémicas concordantes con las de los aborígenes de todo punto de la tierra, llevan a la adoración o mirada holográfica y dependiente de las fuerzas astrales en su devenir y desarrollo… incluyendo su giro permanente…
Vitelmina Ahuir
